LINIERS EN LOS ORÍGENES
En el año 1884, debido a los desbordes del Riachuelo las autoridades de la ciudad planean el traslado de los antiguos mercados a una zona más alejada; el lugar designado es un terreno ubicado en los solares cercanos a la estación Liniers.
El acceso a los nuevos mercados se realiza por la calle San Fernando, que posteriormente recibirá el nombre de Charles Tellier, en honor al inventor del sistema de enfriamiento de la carne; hoy denominada Lisandro de la Torre, en homenaje al senador santafecino que tuvo una muy activa participación en el debate de las carnes a mediados de los años treinta.
El 14 de abril de 1889 se coloca la piedra fundamental de los mercados, con una única construcción: una casilla de madera, edificación donde ese mismo día se instala una fonda y almacén en la actual dirección de Lisandro de la Torre 2421.
En 1890 se aprueba el inicio de las obras de construcción de las nuevas instalaciones. En una primera etapa se inicia la construcción sobre ocho hectáreas y poco después se añaden otras doce más. Posteriormente, se forma una sociedad anónima encargada de la construcción y administración de los Nuevos Mercados Públicos de la Capital. Unos años más tarde, en 1897, se inaugura una escuela en la recova recién terminada y se vislumbra la terminación de la torre principal.
Desde 1898 en adelante, empleados del mercado y nuevos pobladores comienzan a adquirir terrenos vecinos al mismo tiempo que en la zona se instalan nuevos servicios de transporte como el tranvía "La Capital", que uníría Liniers con el barrio de Flores con una estación ferroviaria dentro del mercado. Además, se inaugura un transporte de carnes que lleva su carga desde el mercado hasta Rivadavia y Lacarra, desde donde el frigorífico Anglo Argentino la distribuye en el mercado interno.
El barrio que empieza a surgir alrededor del mercado se conoce con el nombre de Nueva Chicago, debido a que los especialistas consideran que las nuevas instalaciones no tenían nada que envidiarle a las más modernas construcciones norteamericanas. En realidad, ese era el nombre oficial, mientras que las crónicas de la época lo denominan "Liniers" y la población simplemente "Mercados".
APERTURA OFICIAL DEL MERCADO Y MATADEROS
Durante un evento muy concurrido, el 21 de marzo de 1900 se faena el primer animal y el 1° de mayo de 1901 con la calle Directorio recientemente adoquinada comienza a funcionar oficialmente el lugar.
EL DESARROLLO URBANO Y LAS ACTIVIDADES EN TORNO AL MERCADO
El 3 de septiembre de 1915 abre sus puertas el Hospital Juan F. Salaberry, en honor al pionero de la consignación de hacienda. Su hijo, el Dr. Salaberry había organizado la colecta pública para su construcción y equipamiento, donde colaboran gran cantidad de consignatarios y personas vinculadas a la actividad.
Siete años más tarde (1922) el español Malaquías Escandón abre dentro del Mercado la famosa "Fonda de Malaquías", que contaba entre sus clientes al Dr. Lisandro de la Torre, siempre preocupado por la actividad del mercado; a Edmundo Kelly, administrador progresista del Mercado hasta su muerte; a Juan Lalor y a otros numerosos consignatarios que tomaban como punto de reunión el lugar y donde se desarrollaba la actividad informal del Mercado.
A principios de 1930, en la esquina de Tellier y Alberdi comienza a funcionar una moderna sucursal del Banco Nación, que reemplazará a la modesta casilla que hasta entonces funcionaba dentro del Mercado.
Por esos años, Alejandro Mohr (1874-1937), un personaje muy importante para el mercado y el matadero, trabaja por el progreso del barrio y mejora las condiciones de vida y de recreación de los habitantes de Nueva Chicago. Numerosas placas y su busto a la entrada del Mercado recuerdan sus valorados aportes. Junto a Fernando Guío, Mohr contribuyó a fundar en 1911 el Club Atlético Nueva Chicago, del que fue Presidente durante varios períodos y formó la Colonia de "Los Perales ", donde se enseñaba jardinería para los pobladores.
En 1925 Víctor D´Apice (1901-1961) funda y dirige Radio Información, que transmite las cotizaciones desde dentro del predio del Mercado. Ese mismo año, LOZ Radio La Nación brinda el espacio inicial para el primer informativo radial especializado en el agro del país. Por ese entonces, solía decirse que los primeros cien mil aparatos de radio vendidos en el interior fueron resultado de ´La Hora Ganadera´.
Desde su espacio, Víctor D'Apice llevó a cabo una cruzada radial durante tres años que proponía impedir el monopolio instalado de los frigoríficos con la premisa de que "la libertad de oferta y demanda " debía ser la base de una definitiva estructura legal y comercial.
La campaña radial alcanza esferas insospechadas. En julio de 1932 el presidente Justo, a través de su ministro de Agricultura y Ganadería, decreta los fundamentos de la "Ley de Carnes ", que desterraba los monopolios y establecía el ordenamiento de una sana economía ganadera, a la vez que crea la Junta Nacional de Carnes con una dedicatoria "al Ciudadano Víctor D 'Apice", incluida en la ley de puño y letra del Ministro de aquel entonces.
EL RESERO
En 1934 el director Edmundo Kelly promueve el traslado desde su primitiva ubicación en Tagle y Figueroa Alcorta hasta las puertas del Mercado del monumento "El Resero", obra perteneciente al escultor Emilio J. Sarniguet. El monumento fue colocado en el lugar que anteriormente ocupara la piedra fundamental, el 26 de mayo de 1934 en medio de una fiesta multitudinaria. Ocho años más tarde, se levantó la obra a una altura de un metro ochenta, para darle mayor realce.
“Fue el resero una figura tradicional de los campos argentinos, jinete en su pequeño y fuerte caballo criollo, recorrió una y mil veces la tierra virgen y agreste, desolada y extendida, de la pampa inmensa, que poco a poco y con el hollar del ganado, primero, y la reja del arado después, fuérase convirtiendo en tierra fértil y cultivada, extensa siempre, pero poblada ahora por millones de hombres, grandes ciudades, maquinarias modernas, buenos caminos y numerosas vías férreas, que decretaron la desaparición del "resero", cuyo recuerdo ha de perpetuar ese bronce, como figura inolvidable de la tradición argentina”.
OSCILACIONES POLÍTICAS PARA EL SECTOR
A principios de la década del 40 se da comienzo a una serie de obras para el mejor funcionamiento del mercado (entubamiento del arroyo Cildañez y ampliaciones de infraestructura). Las mejoras en lo edilicio se ven acompañadas por las mejoras en las condiciones de trabajo. En 1945 se forma el Sindicato de Obreros y Empleados de Casas Consignatarias del Mercado Nacional de Haciendas. En enero de 1947 se firma un convenio colectivo de trabajo - el primero en la historia argentina - entre los consignatarios y los capataces y peones del Mercado, redefiniendo la escala de sueldos y asignaciones especiales. Sin embargo, comienza también una época de fuertes antagonismos. La huelga declarada en 1948 en el Frigorífico municipal trae como consecuencia una terrible represión policial e inestabilidad institucional.
El 20 de abril de 1950 el Mercado y el Frigorífico pasan a depender del Ministerio de Economía, y se crea unos meses más tarde el Instituto Ganadero Argentino, con capitales de ambos, que dos años más tarde será reemplazado por el Instituto Nacional de Carnes. Durante toda la década del 50, nuevamente, como a principios de los tumultuosos años treinta, el Mercado de Liniers sufre las consecuencias de una política errática. El 23 de noviembre de 1955 pasa a depender del Ministerio de Comercio, pero el 13 de junio de 1956 logra su administración el Ministerio de Agricultura, aunque unos meses más tarde se decide restituir ambas entidades a la Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires.
La década del 60 trajo un poco de sosiego a los turbulentos cincuentas. En 1961 el Centro de Consignatarios puso en la agenda un tema que se discutiría por los siguientes treinta años: la privatización y el traslado del Mercado.
En 1964 se inaugura el Museo Criollo de los Corrales. A mediados de la década, comienza a transmitir Canal Rural, un emprendimiento llevado a cabo por Alfredo Guarino y que aún continúa difundiendo la actividad del Mercado, brindando información ganadera y del sector.
NUEVA INFRAESTRUCTURA Y PROYECTO DE TRASLADO
Debido al gran caudal de operaciones realizadas, durante la década del 70 se realizan mejoras en la infraestructura del mercado. En 1972 se inaugura un atracadero de camiones sobre la calle Murguiondo. Asimismo, se realizan ocho muelles, ciento treinta corrales para vacunos, cien corrales de venta, con pasarelas techadas, en el sector porcinos, y una playa de estacionamiento que puede albergar 500 vehículos. Además, el Museo cuenta con nuevas instalaciones y se pinta la Recova, que en 1979 será declarada Monumento Histórico Nacional.
Durante las décadas de 1970 y 1980 se plantea nuevamente la posibilidad de reubicar el Mercado fuera de la órbita de la ciudad.
MERCADO de LINIERS S.A.
En 1992 la firma MERCADO de LINIERS S.A. conformada por 100 firmas consignatarias y de remates feria gana la licitación pública convocada por el estado nacional para otorgar la concesión de la administración del ex-Mercado Nacional de Hacienda de Liniers.
El objetivo de la sociedad es mantener vigente un Mercado concentrador de hacienda como el de Liniers, formador y orientador de los precios ganaderos. Este mercado concentra alrededor del 20 % de la faena total del país, y el 50% de la faena del Gran Buenos Aires.
De esta manera, durante más de 30 años la empresa se hace cargo del funcionamiento, el mantenimiento y la administración del histórico solar. Cincuenta de sus accionistas operan en el Mercado, con una entrada de 50.000 animales semanales. El predio ubicado en el barrio porteño de Liniers posee una extensión de 34 hectáreas, dentro de las cuales se ubican 32 muelles, 450 corrales para introducción y extracción de bovinos, 40 básculas automáticas (doce de ellas con brazo electrónico), 2000 corrales para venta, varias emisoras de radio y televisión, además de dependencias para control comercial, fiscal y sanitario.
Con esta nueva administración, se crea un seguro que cubre los riesgos de caídos, muertos, accidente o robo de la hacienda desde que es cargada en el campo hasta su venta en el mercado y se pone en práctica un sistema informático con el propósito de modernizar la administración, los procesos operativos y aportar una mayor transparencia al funcionamiento integral de la institución. Los sistemas cubren toda la operatoria del mercado en tiempo real, con una red de 7 km. de cableado de fibra óptica. La pesada se efectúa de manera automática a través de las balanzas que están provistas de un software que registra on line el peso e imprime instantáneamente la boleta que contiene todos los datos de la operación.
Todas las operaciones de los consignatarios son facilitadas con la emisión de la documentación a través de este sistema de datos como así también la información a la prensa que es suministrada en forma completa y en tiempo real. Este sistema y el régimen operativo del mercado posibilita monitorear la circulación de la hacienda y trazar todo el recorrido del ganado, desde el campo hasta después de la faena, haciendo factible que se conozca quién es el productor, de qué campo proviene, su origen, alimentación, sanidad y productos veterinarios utilizados.
MERCADO AGROGANADERO S.A.
El nuevo predio, ubicado a partir de 2022 en el municipio de Cañuelas, posee una extensión de 110 hectáreas, dentro de las cuales se ubican 800 corrales de extracción y venta, 17 atracaderos curvos, 40 básculas automáticas y 2750 metros de pasarelas techadas. Las modernas construcciones de infraestructura son acompañadas también con el desarrollo de medidas para el cuidado ambiental como el tratamiento ecológico de los residuos, el compostaje, la generación de biogás, el tratamiento de los efluentes previo a su vuelco y la posibilidad de recoger y utilizar agua de lluvias para el lavado.
Además, se prevé la generación de energía eléctrica de fuentes renovables a partir de la colocación de paneles fotovoltaicos así como también a partir del biogás generado en biodigestores localizados en el predio del emprendimiento.